El proindiviso, para que nos entendamos es esa relación entre propietarios que lo son de una misma finca. Normalmente es una fórmula que se utiliza mucho en las herencias y que nuestros padres y abuelos piensan que lo mejor es dejarle «todo para todos» y lo que ellos pensaron en su día ser una gran idea no deja de ser un problema en no pocas operaciones de compraventa de cualquier tipo de inmuebles.
Un proindiviso lo pueden formar todo tipo de personas físicas y jurídicas; lo normal es que esté compuesto por hermanos, padres, tíos, sobrinos y hasta un heredero con el que no se contaba o que no se sabe ni que existía. La problemática existe en el momento de ponerse de acuerdo para vender cualquier tipo de inmueble -como por ejemplo una vivienda-. Nadie va a estar de acuerdo en muchas cosas y probablemente haya quien se oponga a vender en unas determinadas condiciones; también puede darse el caso de enemistades manifiestas -donde recomendamos encarecidamente un agente inmobiliario- y situaciones de bloqueo: unos se oponen a lo que proponen los otros y viceversa.
Afortunadamente en los años que corren uno se puede casar, separar, divorciar, hacerse pareja de hecho y hasta ser amigos y residentes en Madrid; nadie obliga a estar con otra persona y tampoco nadie está obligado a estar «casado» en un proindiviso. En situaciones de bloqueo siempre hay una acción de oro que es como la caja de pandora. Normalmente los que no son entendidos del asunto no la conocen hasta que no se lo comentan a su asesor legal.
Una situación de bloqueo que provoque una paralización de la venta de un inmueble pude llevarse meses por delante, o incluso años; para eso, ya puestos a perder el tiempo para nada hagamos la fórmula mágica: solicitar -judicialmente- la liquidación de proindiviso. ¿qué significa eso? quiere decir que le vamos a pedir a un juez que como no nos ponemos de acuerdo con nuestro «marido» nos separe legalmente. En el terreno de la vivienda significa que el juez enviará a una subasta judicial donde nuestro inmueble sea subastado.
Tengamos en cuenta que normalmente las subastas el precio del inmueble con respecto al de mercado puede ser muy bajo: todos van a perder, pero al menos estaremos separados de ese proindiviso. Según nuestra experiencia cuando el proindivisario «rebelde» tiene conocimiento de lo que implica una subasta judicial suele suavizar sus expectativas y exigencias, total va a perder mucho más en una subasta.
En ventas con familiares de por medio siempre recomendamos que haya una agencia -como la nuestra- en la operación, pero en este caso la recomendación es todavía más motivada; en nuestro haber podemos honrarnos que hemos estado hasta en ventas de varios inmuebles con hasta 20 propietarios con resultados muy satisfactorios para todas las partes.
En MAR REAL ESTATE Madrid-Chamberí estamos par ayudarte y ofrecerte un servicio de un modo muy profesional.